El presidente Andrés Manuel López Obrador lo hizo, aunque muchos no lo podían creer en la mañana, lo hizo: presentó una muestra de cómo sería uno de seis millones de billetes de lotería que se venderán a 500 pesos en los próximos meses para que todo aquel que lo adquiera entre a la rifa de un avión Boeing 787 Dreamliner y que será sorteado el próximo 5 de mayo, como el mismo mandatario lo dio a conocer.
La recuperación con la futura venta de los cachitos, en caso de vender la mayoría, sería de dos mil 500 millones de pesos, que se dividirían en dos mil millones que cubriría el costo del avión mismo y 500 millones de pesos para los gastos de operación de un año completo.
Lo que parecía solamente una idea que muchos calificaban de desquiciada y de improcedente, por la imposibilidad de que un futuro ganador pueda tener un avión (llenar el avión de turbosina cuesta 1.4 millones; el hangar mensual cuesta 2 millones y el mantenimiento otros cuantos millones), la rifa se dará y el billetito contiene una leyenda de que las ganancias serían para comprar equipo médico para el Instituto de Salud para el Bienestar. Pero aun así, pareciera una broma, aunque la operación sigue su marcha.
Muchos internautas y algunos medios no oficiales dieron a conocer la nota de que fue a causa de malas operaciones de la Secretaría de Hacienda y no el arribismo de las farmacéuticas lo que causó el desabasto médico en el Sector Salud de todo el país y que el boleto de lotería para el avión era una distracción, aunque para ser una distracción o broma, las cosas ya se fueron demasiado lejos.
Rosalba Chavira Baca, alcaldesa de Tamasopo y una de las gobernantes del estado más activas se encuentra en plena gestión de obras de tipo turístico, educativo y de caminos en el Gobierno del estado, para solucionar muchos problemas y mejorar las condiciones generales de la localidad.
A la Secretaría de Turismo han pedido, de la mano del director de Codesol, Diego Alejandro Zamudio que se rehabilite y se mejore el sitio turístico de El Trampolín, que es uno de los predilectos de los visitantes y que no tiene los servicios básicos que requiere un balneario con la demanda que tiene ese lugar. La gestión está hecha.
Con la finalidad de construir sanitarios, aulas y bardas perimetrales en escuelas de nivel básico de muchas comunidades de Tamasopo, también se llevó un paquete de gestiones a la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado, dado que para Chavira Baca la educación es uno de los baluartes de su administración, cosa que se ha visto con las obras realizadas.
En lo que se refiere a infraestructura caminera, el Gobierno municipal tiene la intención de beneficiar a cuatro comunidades y a cientos de personas con la gestión de hacer la carretera desde La Morena hasta Cesta Blanca, para que su tránsito sea más llevadero y la economía mejore en estos sitios de interés social para la alcaldesa.
Estas gestiones son las pruebas de que el 2020 se inició con todo, trabajando y viendo por los que más necesitan, sin contar con que en los próximos días darán a conocer las obras que harán con recurso municipal.
Hoy al mediodía, en el teatro Manuel José Othón de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) en Valles ocurrió un evento que puede tener repercusiones interesantes para el futuro próximo de la ciudad porque hubo un foro en el que reconocidos arquitectos y estudiantes, entre los que se encontraba nada menos que el rector de la Universidad, Manuel Fermín Villar Rubio y la que fuera presidente del Colegio de Arquitectos, Silvia Olvera Azuara hablaron sobre la idea de un grupo de ciudadanos entusiastas que desean conformar lo que sería el Centro Histórico de Ciudad Valles.
Dentro de los que encabeza este proyecto hay gente importante de la comunicación, de la agricultura, de las empresas turísticas, de la política y de la academia y tienen la intención de que el centro de la ciudad, de la Estación a la plaza y de ahí a las calles y sectores del primer cuadro se pueda recuperar la historia reciente y antigua de la comunidad, aunque no haya edificios históricos, puesto que la intención es la de que se le dé un valor agregado a casas, negocios y lugares que tienen una historia importante para los vallenses en general.
El proyecto está naciendo y aunque no tiene recursos, es una cooperación de vallenses que quieren colaborar para mejorar la ciudad y darle un plus extra a la puerta grande de la Huasteca potosina.
Se comenzó a complicar la situación para la exdirectora de la primaria Vicente Guerrero, María de Jesús Véncer Guerrero, porque ya se supo hace unos días que las laptops que compraron los padres de familia de esa institución y que eran 27, las tuvo en su poder (sin decir dónde), del 24 de mayo de 2018 al 20 de noviembre de 2019, que fue cuando las entregó a la inspección del Sistema Educativo Estatal Regular (SEER), a cargo de Juan Gómez.
Y se complica por el simple hecho de que durante ese año y medio nadie sabe qué paradero tenían las máquinas que estaban destinadas a servir para enseñar computación a los menores de edad, ni para que las quería en su poder y fuera de la escuela la profesora Véncer que fue dada de baja por el SEER el 22 de octubre pasado, después de tres días de protestas de paterfamilias que la acusaban y la siguen acusando de malversar los fondos de las cuotas que cada año pagan los tutores de los niños.
El presidente de los padres de familia además dio a conocer que las laptops estaban en un negocio llamado PC-Office, de esta ciudad y la única justificación que hubo sobre el año y medio sin estar en la escuela fue que las máquinas debían ser manipuladas para instalarles programas, cosa que no se creyó la directiva de padres de familia.
Esta es una punta del iceberg de las anomalías que se han señalado, después de que el sábado comenzó la auditoría del Órgano de Control del SEER a la dirección que ocupó durante seis años la maestra Véncer Guerrero.
